Desenrollando el ovillo: los cromosomas


 Ya hemos visto previamente que los seres humanos tenemos 23 pares de cromosomas: 22 pertenecen a los autosomas y el último par a los cromosomas sexuales. 

Pero en un cariotipo hay otros pequeños detalles:




Como veis en esa imagen hay bastante información. Vamos a ir desgranándola.

Un cromosoma tiene varias partes (vamos a fijarnos en las más reseñables):
Cromátidas: sólo son visibles durante un momento de la división celular. Es cada una de las mitades, idéntica, de un cromosoma duplicado.
Centrómero: es la región estrecha de un cromosoma que lo separa en un brazo corto (p) y un brazo largo (q).
En función de dónde se coloque, podemos clasificar a los cromosomas en metacéntricos (el centrómero está justo en el medio y ambos brazos son iguales), submetacéntricos, acrocéntrico y telocéntrico (el centrómero está tan en el extremo que el brazo corto ha desaparecido por completo).
Telómero: es la parte distal del cromosoma.
Bandas cromosómicas: son segmentos oscuros y claros de los cromosomas que se ven cuando éstos se tiñen con productos químicos y se observan bajo un microscopio. Se nombran por números, y en cada brazo se empieza desde el centrómero hacia el telómero.

Volviendo al dibujo del idiograma del cariotipo, seguramente os habéis fijado que los cromosomas están puestos en un orden concreto. Este orden es siempre el mismo, primero se colocan los autosomas y luego los cromosomas sexuales. Y los autosomas se colocan por orden decreciente de tamaño (el cromosoma 1 es el más grande y el 22 el más pequeño). Además, está organizado en siete grupos 7 grupos, según su tamaño, grandes, medianos y pequeños y según la forma de la pareja cromosómica (metacéntricos, submetacéntricos y acrocéntricos).

Y hasta aquí llegamos con los cromosomas (por ahora), salvo que quieras seguir leyendo 😜.

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